LA CLONACIÓN DE CRISTO, UN NUEVO LIBRO DE SISINIA ANZE
Melita del Carpio
Sólo el título ya despierta en el lector un sinfín
de interrogantes: ¿Un libro religioso?¿Un libro científico?¿Un título de doble
filo como los de Marcos Loayza, cineasta risueñamente hereje, pero que llama a
sus películas “Cuestión de fe” o “El corazón de Jesús”?
Ni una cosa ni la otra. LA CLONACIÓN DE
CRISTO de Sisinia Anze es
una novela diferente en el panorama de nuestra literatura tan marcada por la
problemática social y política, y también de los libros escritos por mujeres
dentro de la narrativa actual.
¿Cómo será
posible clonar a Cristo después de tantos siglos de su muerte?
Este
planteamiento genera un argumento que sorprende al lector por las preocupaciones
y la imaginación de esta autora boliviana frente a un tema que hoy interesa a muchos lectores y
espectadores, pues el cine y la televisión son también espacios de recreación de
estas inquietudes.
Posiblemente
la actividad profesional de Sisinia, administradora
de sistemas informáticos y su experiencia fuera de Bolivia, han influido en
esta obra que transcurre en contextos extraños que podrían ser cualquiera de
las grandes capitales del mundo.
Nombres,
lugares y hechos exóticos inquietan a los autores jóvenes de este tiempo,
generalmente nativos digitales y partícipes de una cultura global y
globalizante que borra fronteras y aproxima personas, problemáticas y
geografías hasta hacérnoslas familiares.
La obra,
sin una localidad definida, aspecto que puede constituirse también en un
espacio abierto a la imaginación del autor, encara lo científico, lo esotérico,
lo fantástico, lo misterioso en una ficción de trama detectivesca en la estos
componentes se combinan para llevar al lector por caminos llenos de intriga y
de suspenso. Estas son las claves del interés que genera.
Cuestiones
bioéticas son planteadas a través de la acción de personajes: ¿Puede el ser
humano jugar a ser Dios?¿Hasta dónde puede llegar la ciencia en su afán de explorarlo
todo y seguir conquistando metas impensables, que por un lado resuelven grandes
problemas para la humanidad y por otro, ponen en peligro la vida misma?
Sisinia Anze
lleva la historia a un terreno en el que se encuentran problemáticas
científicas como la clonación y cuestiones tan extrañas como las imágenes que sangran y lloran. La ciencia
en un terreno común con la fe, con la superstición, con intereses oscuros y
misterios inexplicables. En medio, el ser humano intentando explicarlo todo con
su racionalidad excepcional y a la vez tan limitada como “llenar en un hueco de
arena la inmensidad del mar”.
Una María,
anti-heroína contemporánea, muy bien planteada vive el drama de ser elegida
nuevamente para ser madre de Dios, esta vez no por designios divinos, sino por
decisiones humanas, prosaicas y utilitarias. Ella encarna una humanidad que
confiada en la ciencia es conducida hacia un destino que troca para ella el
cielo en infierno. La novela la lleva a través de una serie de analogías con la
epifanía, pero el clon ¿será equivalente al Cristo original?
La
estructura de la novela exige de un lector activo y atento pues el desarrollo
de los diferentes capítulos juegan incesantemente con el tiempo a través de
flash backs y flash forwards que llevan al lector hacia a atrás y hacia
adelante en la historia como si fuera un gran rompecabezas temporal. Éste hecho
y otros aspectos como el final de la obra nos permiten leer una novela abierta
en muchos sentidos: abierta a la imaginación, a la interpretación y también a
la discusión de tópicos controvertidos y polémicos.
Sisinia es
también poeta por momentos. Su lenguaje narrativo se llena de imágenes que
provocan sensaciones provocadas por efectos especiales hechos de palabras muy a
propósito de esta novela que podríamos calificarla de ciencia ficción, también
un género cultivado por pocos autores bolivianos entre los que mencionamos a
Iván Prado y Miguel Esquirol. Sus
chispazos poéticos recuerdan los cuentos de “El Hombre Ilustrado” de Ray
Bradbury, el narrador por excelencia de ciencia ficción.
“En un lugar desconocido, lejano, remoto, una
estrella descendió del manto negro de la noche y su descomunal brillo se
apoderó de las desoladas laderas como una punzada de desilusión por la tristeza
de un mundo irritado”.
El PEN Bolivia se complace en
acompañar el nacimiento de este libro que seguramente encenderá muchas chispas
divergentes, pero por lo mismo saludables para generar interés, debate y
especialmente aproximación a la lectura y al libro de esta autora audaz e imaginativa. Sisinia: Nos sentimos
orgullosos de contarte en nuestras filas y estamos seguros de que este libro
conquistará muchos lectores pues al decir de nuestro compañero José Antonio
Valdivia: “Los buenos escritores no necesitan defensores; necesitan lectores”.
Felicidades.